5 de julio de 2009

El primer amor

Debo admitir que estoy nerviosa, en unas horas estaré dejando Torreón y ya no sé si reír o llorar. Aquello que conocí y me conoció en los 22 años que pisé este suelo polvoso y caliente.



Me dió todo y yo todo lo dí aunque a regañadientes, cuesta aceptar que estoy medio peleada con esta ciudad porque la he padecido pero más cuesta aceptar que volveré con gusto, no sé si busqué lo que encontré y ahora es mío.


Torreón...

Con su sombrero vaquero y su reliquia, los barrios sin agua y el agua con arsénico...el verano interminable y el esbozo de invierno. Las gordas de cada esquina, los abuelos bailando el danzón recordando la lluvia puntual de San Isidro Labrador.

El luto de la ciudad la cargan los chanates mientras la ciudad celebra el gol de Santos. Catedral del Carmen, refugio, el Cristo de la Noas vigila que siga la Constancia, la Unión y la Esperanza.


El tren varado en los tiempos del algodón y ahora transporta sueños más al norte, a mitad del camino entre el infierno y el cielo nos asentamos, los moteles de paso sacuden el calor de los cuerpos maquileros. Palacios de barro y un torreón derruído.

Siempre hay un niño que envejece en Torreón. (Emulando la canción de J. Sabina)


7 Fisgones morbosones:

Vartan dijo...

Cual moderna Quetzálcoatl eres llamada por la tribu a enseñarles
lo que puede hacer una bárbara norteña.Extrañaremos tu presencia en la blogosfera, pero ahora la región mas transparente del aire te necesita más. Ahora si, el auténtico destierro voluntario.

Mucho éxito.

TeReSa dijo...

Voy a tratar de seguir mandando mis señales desde "allá"...

Yo tbn te voy a extrañar. Gracias por la buena vibra.

Anónimo dijo...

Menos mal que el internet (cuyo costo es no permitir que las personas nos toquemos, nos olamos y nos pasemos bacterias reales -por el momento-) nos deja "seguir en contacto" a pesar de los sitios cambiantes.
Seguiremos, creo yo, afectándonos nuestros criterios y sí, los movimientos terrenales de una u otra forma modificarán las relaciones aunque no creo que al grado de la muerte. Las nostalgias que llegues a adquirir tendrán que domarse, no hay remedio.

El Rulfiano dijo...

Teresa, te deseo muy buena suerte y mucho éxito en esta aventura que comienzas. Espero que sigas escribiendo en tu blog y nos visites de vez en cuando.
Muchas gracias por tu comentario y la frase de Truman Capote, la acuñaré -como ya lo hice en mi memoria- en donde pueda verla cada vez que sienta que lo que hago no es útil (¿acaso el arte lo es? ¿o no lo es, como afirma Oscar Wilde?) o que no vale la pena.
Muchas gracias nuevamente y mucha suerte; Teresa, aunque no te conozco personalmente, no se porque siento que te voy a extrañar.

TeReSa dijo...

Yorch: En efecto, al hacer estos cambios hay que saber lidiar con los que vaya surgiendo aunque no nos guste o no estemos acostumbrados. Te mando un super abrazo y un beso.

Rulfiano:Gracias por los buenos augurios, que todo sea para bien y sino pues ya lo bailado nadie me lo quita. Extrañaré todo lo bueno de Torreón, incluyéndote. Un beso.

Botica Pop dijo...

Al principio duele un chingo. Y después ya no. Y después se llena uno de alegría o tranquilidad. Y vienen los malos dias en los que uno quiere volver corriendo. Pero no, y queda el orgullo de uno mismo. Es hermoso todo eso. Suerte, Teresa.

TeReSa dijo...

Si, ahora estoy en un mundo raro llamado Tlalnepantla...quisiera volver a ver a todos...someday, soon.