23 de diciembre de 2008

Principio y Fin


Se acaba el día, y empieza otro, cada vez más cerca del principio y del fin al mismo tiempo...todo bien conmigo, el año pintó bien: adiós escuela, sigo con novio querendón, retomé el gusto por mis videojuegos de Mario Bros aunque sea en emuladores, vacaciones, degusté (no devoré) muchos libros, bienestar y enfermedad... supongo que es porque no se puede la perfección.

A fin de cuentas, no me molesta la Navidad porque no la celebro...¿consumismo, vanidad, hipocresía? Hmmmm, tal vez una pizca más de lo que tuvimos durante los meses anteriores pero en estos días la mayoría anda susceptible por culpa de tantas lucecitas en las calles. Sólo sé que tengo dos libros nuevos de regalo anticipado, y puede ser que me vuelva peor con Salinger y Kiekergaard. Claro que esta es una época de esperanza. Jajaja.

Soy distinta pero casi igual.


****************

"Tan joven y tan viejo"

Lo primero que quise fue marcharme bien lejos;
en el álbum de cromos de la resignación
pegábamos los niños que odiaban los espejos
guantes de Rita Hayworth, calles de Nueva York.
.
.
Apenas vi que un ojo me guiñaba la vida
le pedí que a su antojo dispusiera de mí,
ella me dió las llaves de la ciudad prohibida
yo, todo lo que tengo, que es nada, se lo dí.

Así crecí volando y volé tan deprisa
que hasta mi propia sombra de vista me perdió,
para borrar mis huellas destrocé mi camisa,
confundí con estrellas las luces de neón.

Hice trampas al póker, defraudé a mis amigos,
sobre el banco de un parque dormí como un lirón;
por decir lo que pienso sin pensar lo que digo
más de un beso me dieron (y más de un bofetón).

Lo que sé del olvido lo aprendí de la luna,
lo que sé del pecado lo tuve que buscar
como un ladrón debajo de la falda de alguna
de cuyo nombre ahora no me quiero acordar.

Así que, de momento, nada de adiós muchachos,
me duermo en los entierros de mi generación;
cada noche me invento, todavía me emborracho;
joven y tan viejo, like a rolling stone.

-Joaquín Sabina


5 Fisgones morbosones:

Anónimo dijo...

Así, seguir...

Vartan dijo...

con S.K. no se puede volver peor. Mas bien volverse experta en angustia.


Merry Christmas,

Eduardo Cabreado dijo...

A eso agrega tu incursión a la blogosfera como uno de los miembros más activos de la ciudad.
Un gustazo conocerte n_n

TeReSa dijo...

Gracias por sus saludos, espero que se la pasen bien en estos días.

Tienes razón, Eduardo, olvidé que este año entré a la onda 'bloggera'. Dulce tormento jajaja.

Anónimo dijo...

Los animales que nos precedieron evolutivamente requirieron del celo para la reproducción. Con ello, se logró el intercambio genético adecuado para permitir la proliferación de copias lo suficientemente diferentes para trascender. La abundacia de copias quizás no es estrictamente necesaria, pero dá confiabilidad a diversos ecosistemas. Eso, sin que las copias "tuvieran que pensar mucho durante el proceso orgiástico".

La navidad es una especie de época de celo comercial. Con ella, se desarrolla un intercambio económico exhuberante que permite la proliferación de múltiples actividades productivas y de servicios. El sistema capitalista funciona hoy aunque estrictamente no sea necesaria la abundancia de artículos plásticos con los que uno se aburre casi inmediatamente. Pero dá la forma al ecosistema de hoy soportado por un planeta que aún no truena. Así, productores y consumidores "no tienen que pensar mucho dentro del proceso orgiástico".

Pero el hombre ya no se reproduce por celo y quizás el futuro inmediato no soporte un consumismo descabellado y regido por las dos leyes -oferta y demanda- tan manipulables por los conocedores. Quizás los recursos del mundo escaseen y por necesidad se reduzcan las otras épocas de celo comercial: san-valentín, pascua, días de la madre, maestro, padre, abuelo, amante, halloween, etc, etc. Habrá que ver los reportes estadísticos de la navidad del 2008. Supuestamente andamos en crisis... ¿será?