Recuerdo mis años de niñez en plena época de los 90, no sabría bien como definir esos años porque no rebosaba de felicidad, sino de fantasías entre la escuela y la calle. Nunca faltó comida en la mesa, algunas veces ropa y juguetes. Los recuerdos de mi infancia son borrosos y poco claros, puedo suponer que es debido a que intento borrar las imágenes de mamá enojada o deprimida, mi padre ausente por el trabajo y porque no tenía muchos amigos, solía jugar con chicos de la cuadra la mayoría de ellos muy “leperos” o demasiado “ñoños” para mis gustos.
Eran los tiempos de la bicicleta, jugar a las escondidas, patinar, a los atrapados y otros juegos. Prefería la bicicleta porque podía andar por vagando, estar sola sin que se viera raro. Claro, yo quería estar con los demás niños y tuve mis temporadas en que frecuentaba a diario a alguna vecinita, pero no faltaba que por envidias o chismes causados por las madres, la de ellas no la mía (creo) nos separáramos. Es difícil convivir cuando a mis hermanos y a mí nos exigían mucho en la casa en términos escolares y de quehaceres domésticos mientras que a los demás niños los dejaban salir desde que llegaban de la escuela.
Nunca tuve Nintendo, por supuesto que lo llegué a jugar pero no era buena debido a mi poca coordinación motriz...junto que usar un solo aparato para 6 o más niños se hace más difícil la práctica. Mi hermano solía pedirme que lo acompañara a las ‘maquinitas’ donde él si era muy bueno, mis créditos de me acababan antes de 5 minutos.
Casi no veía la tele, me aburrían los programas de comedia y las telenovelas sólo eran para pasar el tiempo mientras era mi hora de salir a la calle. Me gustaban las caricaturas pero que fueran de acción: Thunder Cats, Cazafantasmas, Batman, Los Gatos Samurái...hasta que nos pusieron cable en el 93...
0 Fisgones morbosones:
Publicar un comentario