28 de marzo de 2013

Sombra



Como si no importara la demás, la vida viene con su estaciones y me refugio en mi abúlica necesidad de sentirme triste nomás porque es fácil, permanecer en el cuarto esperando que las sombras consuman cada parte del mismo para imaginar que ya no estoy ahí. 

Por lo tanto, llegó a la conclusión de que debía abandonar el pueblo e irse lejos. La tardía primavera de ese año fue penosa y demasiado intensa. Las largas tardes florecían y se prolongaban, y toda su verde dulzura resultaba repugnante.[...] Los acontecimientos tristes y terribles nunca la habían hecho llorar; sin embargo en esa estación muchas cosas la pusieron al borde de las lágrimas.
A veces, muy temprano por la mañana, salía al patio y observaba largo rato el cielo del amanecer. Era como si de su corazón surgiera una pregunta y el cielo se negara a responderla. 

"Frankie y la boda"
-Carson McCullers

0 Fisgones morbosones: