19 de marzo de 2013

No pasa nada

De lo que poco que recuerdo de mi niñez puedo decir que fue bastante extraña, aún a esa edad me daba cuenta que había algo en mí que hacía que la amistad entre mis contemporáneos no fluyera o era algo superficial, con los adultos la cosa era igual pues ellos me querían tratar como una niña más y si bien no podía saber realmente que pensaban de mí, notaba un poco de desconcierto de su parte pues siempre he sido parca o austera en mis diálogos, por ejemplo mis abuelos tan cariñosos con mis primos se mostraban distantes conmigo sé que me querían pero no sabían cómo tratarme  Es como si no tuviera una gracia infantil con la que cautivar a propios y extraños. Creo que aprendí a fingir a temprana a edad, pretender que me divertía, que era feliz -¿lo era?-. 

Todavía en los años subsecuentes en los que se supone que haces amistades para toda la vida no fue precisamente lo más memorable, siendo un bicho raro no me escapaba de ser molestada por algún escuincle odioso que pensara que ser la de mejor promedio, leer bien, gorda, nariz grande o por cualquier motivo que les pasara por su cabecita simplona. La mayoría de las veces los ignoraba, sin embargo a más de uno llegó a saber que debían pensarlo mejor antes de volver a querer hacerse el gracioso. 

Pero la verdad nunca me hicieron llorar o buscar complacerlos y me sorprende que a esa edad pudiera saber que estaba lidiando con pobres diablos y que el malestar duraba un rato y mi vida imperfecta continuaba con o sin ellos. Aparte, en honor a la verdad debo decir que yo también llegué a molestar, supongo que hay una parte del cerebro que nos impulsa a seguir conductas maliciosas sin un dejo de empatía. 

Ahora me doy cuenta de que sigo siendo igual, con la diferencia que ya no llego a los golpes pero tengo mi reserva de palabras hirientes, todavía me causa escozor lidiar con las personas pero el principal cambio que he notado es que sé en qué momentos soy feliz. 


"Soy de esas mujeres a las que nunca les han regalado flores, supongo que es una experiencia saber que tu sonrisa bien vale la muerte de algo tan hermoso." 


6 Fisgones morbosones:

Eduardo Cabreado dijo...

En tiempos de mobbing labora, no hay de otra mas que sacarlas garras o ser consumido...

reptilio dijo...

se que no son competencias

pero en la semana me llamaron "arisco" hahaha y hasta me puse a buscar la definicion!

que mas da

VioletaJacaranda dijo...

Sé que no son competencias, pero ayer mi madre me dijo que desperdicié esos años de la vida en que se hacen amigos para toda la vida. Yo no sé si los desperdicié, pero supongo que en su tiempo no tenía para mi importancia alguna ser amiga de una bola de simios incípidos. Jamás se me había ocurrido pensar, hasta hoy, que tal un día me arrepentiría.

la MaLquEridA dijo...

Ayer me dijeron que tengo una vida vacía porque no tengo amigas ni me río a carcajadas. Al igual que tu fui "rara" de pequeña y de grande mas porque no comparto con nadie la vida. Soy un ser solitario y no me arrepiento de ello. Las amigas sirven para dos cosas: para nada y para una Chin@%#^>^, al menos las que a mi me han tocado.

Pocos son -por no decir nadie- que comprenden que ser feliz no es estar rodeado de gente sino serlo consigo mismo.

Al menos yo, ya me canse de decir que soy feliz siendo como soy, ya no intento convencer a nadie, ya no me importa que piensen lo que quieran, igual soy feliz.

Cuidate.

jesús hernández dijo...

me uno a la gente extraña, parece que somos varios. por qué no nos hacemos amigos??...
un abrazo, teresa... bonita la serie de abajo...

Aseret dijo...

*Eduardo Cabreado: Y sí, uno que otro ha visto que calladita me veo más bonita.

*reptilio: Ahora ya sabrás si lo tomas como ofensa o un mero adjetivo.

*Sofía: No sé si fue desperdicio, no me arrepiento de mis decisiones y lo reafirmo cuando llego a ver en el periódico fotos de las bodas de mis excompañeros y sé que ese tipo de vida no era para mí.

*Malquerida: Hay momentos en que si me gustaría tener una amiga de las que dicen incondicional, pero sé que no puedo pedir lo que no doy.

*jesús hernández: Me he encontrado con gente afín a mis valores e ideas y es cuando pienso que podríamos ser amigos si bien un falso orgullo me detiene, sin embargo no niego que me gusta encontrar empatía aunque sea a larga distancia.

Saluudos!!!