17 de octubre de 2010

Abandono


En este viaje que hice a Torreón percibí que la sensación de abandono se ha acentuado por el temor que tiene la gente de perder lo que le ha costado tanto trabajo a manos de unos cuántos. Muchos negocios que podrían ser una fuente de ingresos para el dueño y el gobierno han cerrado o nunca prosperan con el ambiente actual de fatalidad.

No sólo hablo de los negocios de siempre de esos que forman sus propias cámaras de comercio y cuyos propietarios son las mismas familias que aparecen en la sección de Sociales, sino de las empresas pequeñas que nacen de las ideas de gente de clase media-baja, universitarios con proyectos, amas de casa, desempleados, en fin; personas que no nacieron en cuna de oro pero sí con ganas de salir adelante. Creo que aun estamos lejos de pensar que uno mismo puede ser su propio jefe.

Cuando los de la iniciativa privada hablan frente a las cámaras de televisión, radio o periódicos locales sobre una mejora en los apoyos para las empresas obviamente hablan de sus empresas, y es válido, pero por parte de ellos qué les ofrecen a sus trabajadores además de salarios irrisorios, horarios que violan la ley federal del trabajo, no pagan horas extras, malos tratos además de esa actitud de benefactores hipócritas. "Siempre hay alguien hará el mismo trabajo y hasta por menos dinero", esa es la consigna que lleva a mucha gente a permanecer a regañadientes en un trabajo.

Prácticamente estamos atados frente a un gobierno que no reconoce la actitud emprendedora de las clases bajas, sólo los ve como una fuente bien localizada de impuestos, corrupción y trámites engorrosos, como si quisiera desalentar a quienes no buscan ser burócratas rémoras o formar parte de la legión de empleados mal pagados. Si no tienes un padrino, compadre o "palanca" dentro del gobierno eres un cero a la izquierda en la competitividad.

Ahora bien, aparte del saqueo institucional viene el saqueo de otra organización que compite para ser la de mayores ingresos después del petróleo: el narcotráfico y sus ramas de delincuencia; si bien no somos obligados a consumir las drogas, las extorsiones se han vuelto parte de los gastos fijos de muchos negocios como un impuesto más de quienes ahora rigen y controlan este país.

3 Fisgones morbosones:

Animeisama dijo...

y el gobierno de coahuila solo genera programas sociales que consumen muchos recursos y no generan lo suficiente, sin contar que en coahuila no existe el apoyo a emprendedores.

ahh y el crimen que ha subido en todas sus modalidades.

TeReSa dijo...

Las dádivas efectuadas por los gobiernos de casi todo el país, tratan de encubrir su ineptitud para gobernar y también el pueblo olvida esto último.

Gracias x el comentario...

El Rulfiano dijo...

El gobierno en todos sus niveles y los empresarios (que siguen siendo los que ostentan el poder)han descuidado dos aspectos muy importantes: La pobreza y la inseguridad. El número de pobres va en aumento tipo avalancha, y la inseguridad ya se implantó -a falta de gobernabilidad- en el modo de vida del mexicano.
La brecha entre pobres y ricos es tan ancha y tan profunda, y los balazos son tan comunes cada día, que las historias de hace 100 y 200 años corren el riesgo de repetirse.
Un beso y un abrazo.