26 de abril de 2010

Destierro voluntario



"Con decirte que esta temporada en París, aun con las escaceses que paso y el sentimiento de frustración y soledad que a veces me invade, debe ser sin embargo mi periodo más brillante"

Cinco años de vida - Mario Benedetti


Las noches son las más difíciles de lidiar, cuando en el departamento sólo escucho el tic-tac del reloj de la cocina y enciendo el radio para amortiguar un poco la sensación de vacío con canciones igual de vacuas, y sin embargo al repasar lo que ha sido de mí en estos meses de mi formal destierro voluntario no me queda más que sonreír...sabía que necesitaba irme y qué mejor que a este punto -el ombligo de la luna- donde se respira la inmensidad de la pequeñez humana apretujada corriendo sin saber si se concretará el sueño abandonado en la cama para tomar el primer metro del día.
Por mi parte no me quedaré con la duda de escarbar entre el suelo y el cielo hasta el último día, sinónimo de que hubo vida.

No hay fotos que reflejen fielmente lo que veo a diario o palabras suficientes para describir lo que traigo dentro.

2 Fisgones morbosones:

El Rulfiano dijo...

Teresa, que paradójica y diferente es la vida de cada uno de nosotros. Yo, a diferencia tuya, me siento atrapado en la rutina diaria, en el ir y venir, en los caprichos de los demás. Por eso me gustaría algo como lo que tú estás viviendo: soledad, y más soledad, para ocuparla con lecturas y creatividad a través de la escritura. Sé que tú también lo haces; para mí tú situación sería mi paraíso.
Un beso y un abrazo

TeReSa dijo...

Mi rutina es determinada por el ánimo del que esté al mando, puedo tener días de completo ocio en la oficina y al siguientes es de vámonos a X Estado...Pero bueno, prefiero no quejarme y sólo exponer lo que voy sintiendo.

He abandonado un poco los libros pero es que leo uno en una semana, como sea no se pierde el gusto.

Beso y abrazo!