28 de abril de 2009

Plan 0

...y si sobrevivimos, ¿¿¿ya sabemos para qué vamos a vivir???


Puede significar un avance o un retroceso según el punto de vista de cada individuo, algunos más apegados a la ciencia verán una oportunidad para seguir investigando, planeando, inventando; por otro lado están los que reciben los cambios como señales del cielo para volver al camino y no jugar con la ira de Dios.
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No encuentro mi lugar cuando todo empieza a reorganizarse...dónde ubicarme cuando desde hace años me despedí de lo que consideré demasiado racional y cuadrado, además de abandonar camino de pretender alcanzar la divinidad. Este camino se bifurca infinito, o hasta que yo tenga un punto finito.
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No vivo más que de pretenciones.

3 Fisgones morbosones:

Eduardo Cabreado dijo...

Mmm, nop. Desgraciadamente todo sigue siendo igual ¬¬

Botica Pop dijo...

conócete a ti mismo y conocerás al dios. lo más bonito de la vida es que tiene infinita posibilidades. la más bella manera de vivirla, es amar cada una de tus decisiones.
un beso.

Anónimo dijo...

Yo creo que la individualidad nos trae muchas confusiones. He llegado a pensar que los pronombres serían confusiones también quizás exceptuando al nosotros.
No podría existir el yo porque no habría a quien(es) comparativamente hablando, decírselo y aprenderlo por nuestros propios medios resulta muy difícil. Simplemente un solo ser humano no puede ser, porque no habría quien lo alimentara y retirara sus desechos con eficiencia para que siguiera vivo y filosofando. De la misma forma el tu y los el/ella/ello no pueden existir por sí solos. Quizás tampoco los ustedes y ellos/ellas... Quedaría solo el nosotros.
El nosotros es algo más allá del ser humano, que permanece pues es usado por personas vivas que tienen consciencia del hecho. El nosotros es la sociedad viva que dura mucho más que el ser individual. Por eso me confunde que la individualidad realmente exista, pues no es auto-sustentable.

A la sociedad se le "podan" individuos y ésta sigue viva. Solo los individuos se quieren mucho a sí mismos confundidos por la individualidad y el supuesto libre albedrío. La poda está fuera de la cualquier compasión, es práctica y expedita sugiriendo que si fuera de otra forma la sociedad no existiría y por ende no habría confusiones de individualidad tampoco. El supuesto individuo viene de la sociedad, del sexo, por lo que la creación también queda erradicada.

Supongo que estas ideas no son de ningun individuo, yo, sino que son parte de las sociedades desde tiempos muy remotos. Los yoes se confunden tanto que a veces leen algo por ahí del acúmulo social, olvidan que lo leyeron y despiertan una mañana pensando que inventaron algo nuevo después que su cerebro alborotado sacó el viejo recuerdo de polvorientos rincones.